TUTORIAL. Probando el linóleo gráfico.


Al linóleo le aplicamos un apresto para homogeneizar su superficie y hacerlo más fácil de dibujar. Tiene 2,3 mm de grosor lo que le otorga un espesor regular a todo su largo, justo lo necesario para grabar con comodidad.


Empezamos dibujando con un lápiz de color, para bocetear. La superficie recibe el lápiz bien, sin mayores problemas.



Acabada la construcción repasamos las líneas finales con otro color. Hasta ahora todo normal, la superficie es suave y recibe sin dificultad los trazos.




Y, ¿qué pasa si rayamos con un lápiz grafito? Pues no mucho. Recibe también el lápiz sin ningún problema.
 



Ahora fijamos el dibujo con un plumón a tinta, un Sharpie común y corriente. Otra vez el color se adhiere bien, no hay problemas y se puede dibujar tranquilo.



¿Aguantará un pincel? Sí. Continuamos dibujando con pincel y todo ok.



¿Y un lápiz pasta? También con lápiz pasta la cosa va de maravilla.



Listo el dibujo procedemos a grabar. Es importante recordar que el linóleo es mejor trabajarlo con sus herramientas correspondientes. En caso de que no se tengan unas gubias cualquiera servirán siempre que tenga el filo bueno.



Para el grabado el linóleo es suave de sacar, cómodo para el corte y lo mejor es que al no ser una goma propiamente al llegar al final de los cortes basta levantar la herramienta para que la viruta se quiebre sola y dé acabado, lo que resulta muy bueno pues no es fácil cortar y dar detalle en áreas muy pequeñas.


El apresto se mantiene bien, adherido al linóleo y no molesta para nada. Los cortes salen limpios y se avanza muy rápido y con nada de esfuerzo. Es grueso y con cortes poco profundos resulta muy bien el grabado sin necesidad de meterse muy adentro.



Terminado el proceso de grabado pasamos a hacer una prueba. En este punto es importante tener en cuenta que el apresto que le colocamos encima al linóleo es una capa para mejorar la adherencia de los lápices y otros útiles a la hora de dibujar.



Pues nada. Preparamos la prensa y vamos al entintado.





Para lo siguiente usaremos nuestro tintero de porcelana con base antideslizante y un rodillo Estudio de 20 cm. El papel será simplemente bond de impresora para realizar la prueba y tinta corriente de impresión offset, de la más quiltra que encontramos por ahí.



Nuestro taco ya entintado. Recibe la tinta sin mayores problemas y rápidamente. Iremos saturando el taco a medida que hagamos pruebas porque si le ponemos toda la tinta a la primera lo más probable es que se empaste completo y se ensucie.



Entintamos...



Y aquí está la estampa. Ni un problema con el linóleo que pasa parejo por la prensa y copia excelentemente con poca presión.



Si ven de cerca, el rodillo duro mantiene la tinta lejos del fondo del taco que queda limpio y parejo.



Y así concluimos nuestra prueba. El linóleo gráfico funcionó bien, es cómodo de grabar, se trabaja sin esfuerzo y acepta todo el detalle que queramos ponerle. Otro acierto para crear de una manera económica, útil y accesible. ¡Saludos!



1 comentario:

Rebecca dijo...

¿Dónde están ubicados?